El arte de la cita
Aquí les dejo un texto que escribí hace tiempo y que me sirvió para seguir desarrollando todo un espectáculo sobre el arte del siglo XX que, probablemente, no vean nunca sobre un escenario.
El arte de la cita
“Soy mimo conceptual contemporáneo… Es lo que hay”. (Tras la primera frase, el payaso mueve la cabeza repetidamente, afirmando. Al decir la última, se encoge de hombros y muestra las palmas de las manos.)
Esto es una cita. No es que haya quedado con ustedes, no. Bueno, sí. Sí pero no. Quiero decir que lo que acabo de decir es una cita… Que estoy citando a otro señor que ha dicho eso, un señor que se llama Alex Navarro. Habría estado bien hacer así con los dedos (signo de comillas), habría sido lo suyo, lo correcto, pero no lo puedo soportar. Es un gesto que me revienta. Hago así con los dedicos (signo de comillas) y poto. (Gestos correspondientes.)
El caso es que Alex Navarro dice: “Soy mimo conceptual contemporáneo… Es lo que hay”. Y yo repito: “Soy mimo conceptual contemporáneo… Es lo que hay”. (Repite los mismos gestos cada vez.)
¿Y por qué?, se preguntarán ustedes. Pues porque soy un mimo conceptual contemporáneo. Si el señor Alex Navarro dijera: “Soy mimo conceptual contemporáneo… Es lo que hay”, y yo no fuera un mimo conceptual contemporáneo, me limitaría a responder: Yo, también. O yo tan mal, eso ya depende de cada uno.
Pero como soy un payaso conceptual, tengo que citar. Es lo que tiene ser payaso conceptual, que tienes que citar… (Gestos como diciendo: es lo que hay.)
Se puede citar de muchas maneras. Se puede citar discretamente: “Soy mimo conceptual contemporáneo… Es lo que hay”. (Girando la cabeza y tapándose la boca con la mano.) Se puede citar ostentosamente: “¡Soy mimo conceptual contemporáneo… Es lo que hay!”. (Gestos grandilocuentes.) Puedo citar sin palabras: (El payaso se señala, coge su nariz, la suelta, esconde las manos detrás de la espalda mientras da vueltas a la cabeza. Mira la hora, la enseña y se vuelve a señalar a sí mismo. Se para, mueve la cabeza afirmando repetidamente y se encoje de hombros enseñando las palmas.)
Se puede citar… ¡¿Deconstruyendo?! ¡¿Quién ha dicho deconstruyendo?! ¡Vamos a ver, vamos a ver, vamos a ver…! ¡No queramos correr antes de andar! (pasos penosos por el escenario.) ¡Por favor se lo pido!
Yo cito de memoria. Lo malo es que no tengo. Me… Memo… Memoria. No tengo. De ahí que sea minimalista. “Conceptual minimalista”. Esto es otra cita. De Alex Navarro… (Gestos como diciendo: es lo que hay.)
En realidad, lo mío, más que citas minimalistas son citas a ciegas. Como no tengo memoria, cito a tontas y a locas y luego pasa lo que pasa… Con las tontas.
Y con las locas, ni te cuento.
¡Y con las citas… Uf!
Las unas con las otras… Se imaginan, ¿no? (Gran gesticulación creando una maraña con las manos.)
Ahora ustedes, al oírme hablar a tontas y a locas, querrán que ponga ejemplos.
(Mira insistentemente al público.) No, si no quieren que ponga ejemplos lo dicen y en paz.
Anda que no son ustedes conceptuales ni nada. ¡¡¡Sin ejemplos, sin ejemplos, hala, todo teoría!!! ¡Qué barbaridad! ¡¡¡Deconstrucción, deconstrucción, venga…!!! (agitando las manos como un energúmeno.) ¿Quieren ejemplos o no? Pues, ¡díganlo, hombre, díganlo!
Ejemplo:
“Puede que los ricos monten en camello, pero no es tan fácil que vean a través del ojo de una aguja”. Cito de memoria, pero ya habrán adivinado a quién. (Mira al público asintiendo con la cabeza) A la señora Gamp, exactamente.
Pero, la señora Gamp, se preguntarán ustedes, ¿era tonta o loca? No se sabe. En realidad, la señora Gamp no existió. La señora Gamp era Dickens. Dickens fue quién escribió: “Puede que los ricos monten a ojo, pero no es tan fácil que encuentren una aguja en un camello”.
¿La señora Gamp era Dickens? También dicen que era cierta enfermera, a la que Dickens oyó decir: “Puede que los camellos enhebren a los ricos, pero no es tan fácil que monten una aguja a ojo”.
El tema de los camellos y las agujas es muy socorrido. Recurrente, que diríamos los “conceptual clowns”. Por eso Dickens citó a la enfermera Gamp. Bueno, no sabemos si la enfermera se llamaba Gamp. Dickens, en cambio, se llamaba Dickens. Seguro.
“Puede que los ricos monten en camello, pero no es tan fácil que vean a través del ojo de una aguja.”. Una cita literal. Y literaria, si a eso vamos.
No como las mías, que son minimalistas. Y de segunda mano, porque cito a Dickens que cita a la enfermera, que vete tú a saber a quién estaría citando…
¿Y si uno es payaso conceptual contemporáneo y no cita? Pues eso se llama apropiacionismo, que es una rama conceptual distinta de la que hemos visto hoy.
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alicia sienes -