Gabinete artístico
Visito la exposición del mismo título en el Palacio de Sástago, que muestra la colección particular Los Bragales, y "leo" una historia que no tiene nada que ver con la realidad, puesto que el coleccionista que muestra sus adquisiciones es santanderino.
Mi historia dice así: Un discreto coleccionista, asiduo a la Galería Libros, compra obras de pequeño formato en las sucesivas exposiciones que organiza don Víctor Bailo. Cuando ya ha formado una pequeña colección, conoce a Miguel Marcos, quien le anima a ser más ambicioso convirtiéndose en cliente suyo. El buen señor se deja convencer y empieza a adquirir obras de formatos descomunales en la galería de su nuevo asesor. Poco después, advierte que, con semejantes formatos, se ha quedado sin sitio. Pero, ahí está Miguel Marcos para permitirle seguir cultivando su obsesión mediante un nuevo formato que apenas ocupa espacio: el vídeo.
Por si fuera poco, y como tiene mucha mano, Miguel Marcos organiza una exposición en el Palacio de Sástago, que halaga la vanidad del cliente y que permite al galerista cobrar los correspondientes emolumentos como comisario de la misma, a cargo, por supuesto, del erario público.
1 comentario
Pepe Cerdá -
¡Ay! Señor, Señor.
Qué díficil es cumplir años en este oficio y mantener la fe y el temperamento artístico, que como tú muy bien recordaste vía Chesterton, es sólo cosa de principiantes.
Yo digo lo mismo pero en basto: las putas que se corren no valen para el oficio.