Velatorio
–Oh, no, Barbarita: eso está como prohibido: por eso, si se produce un silencio de esos, que parece que hay peligro de que piensen en la cosa, tienen que cortar y ponerse a contar historietas de cualquier cosa, como aquel que en un velatorio, como se callaron todos y el silencio se iba haciendo más y más tirante, estalló de pronto "Pues yo he visto sandías que pesaban cinco arrobas".
Agustín García Calvo. Diálogos de gente. Lucina.
2 comentarios
cano -
josep m. fernández -